Amadeu Palliser Cifuentes | Lector
Últimamente prolifera un estado de revisionismo pesimista, como, por ejemplo: la recogida de firmas contra los cortes de la Meridiana; el comunicado de partidos unionistas informando que algunos comerciantes de la zona se han quejado por la pérdida de su nivel de negocio, por estos cortes; artículos como el de Antoni Bayona, “¿Hacia dónde vamos?” (Ara, 11 de febrero), etc.
Evidentemente, el estado de ánimo es subjetivo, pero debemos ser capaces de objetivizar la onda de información e intentar en contexto, ya que, siguiendo con los ejemplos citados: la recogida de firmas fue ridícula; el decremento comercial inexistente (a las 20.00 h, los comercios ya cierran, los clientes de la zona pueden acceder sin problemas, por el contrario, incluso algunos hacen “agosto”); y artículos analizando el referéndum, escritos en la actualidad, sin ponderar la perspectiva del momento, carecen de rigor historicista.
A pesar de esta onda, considero que debemos persistir, siendo conscientes de que todo es muy difícil y costoso, nadie nos va a regalar nada, pero rendirse, bajar los brazos, es olvidarse de los presos y exiliados embargo, no lo merecen ni podemos permitírnoslo.
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